El Gobierno del presidente Donald Trump está evaluando una polémica y delirante «propuesta»: Autorizar un programa tipo reality show en el que inmigrantes competirían en desafíos para ganar la ciudadanía estadounidense como premio.
Aunque las autoridades han asegurado que la idea aún no cuenta con aprobación formal, el solo hecho de considerarla ha generado inquietud por el enfoque humillante que representa un plantemiento de este tipo.
La inédita iniciativa fue revelada por el diario británico The Daily Mail, que reportó el supuesto respaldo de la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Kristi Noem. De confirmarse, la medida marcaría un nuevo nivel de trivialización de la política migratoria, reduciendo el acceso a la ciudadanía a un show televisivo en vez de un derecho basado en méritos legales y humanos.
La subsecretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, admitió que la agencia gubernamental «recibe cientos de propuestas para programas de televisión al año» y que cada una «se somete a un riguroso proceso de selección antes de su rechazo o aprobación».
«Necesitamos revitalizar el patriotismo y el deber cívico en este país y con gusto revisamos propuestas originales. Esta propuesta no ha recibido aprobación, ni rechazo del personal», advirtió.
La «propuesta» está pensada como «una celebración de ser estadounidense y del privilegio de ser ciudadano de Estados Unidos», precisó el productor, Rob Worsoff, a The Wall Street Journal.
Por su parte, la subsecretaria McLaughlin precisó que la revisión del proyecto «está en las primeras etapas» y afirmó que «cada propuesta se somete a un exhaustivo proceso de evaluación antes de su rechazo o aprobación».