Este jueves 3 de abril vence el plazo para que la ciudadanía exprese sus observaciones sobre el proyecto INNA de AES Andes, las que se pueden realizar a través de la página web del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). Esta iniciativa podría afectar significativamente el funcionamiento del Observatorio Paranal, un sitio clave para la investigación científica a nivel global, debido a la claridad excepcional de sus cielos.
Ubicado en la comuna de Taltal, en la Región de Antofagasta, este sitio astronómico ha sido clave en numerosos descubrimientos e investigaciones. De ahí la voz de alerta que han levantado las comunidades y los científicos en Chile y el mundo entero, ante la grave amenaza que significaría el aumento de la luminosidad, el polvo y las vibraciones, de llevarse a cabo esta propuesta de hidrógeno verde ubicada a pocos kilómetros de distancia.
En este contexto, La Federación de Estudiantes de la Universidad de Antofagasta, a través de su comisión de ciencia y medio ambiente y la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica del Norte (FEUCN), formaron una alianza para levantar una campaña con el objetivo de informar a la población estudiantil y a la sociedad civil, mediante charlas y stands educativos, respecto a los efectos que podría provocar este proyecto.
Otro de los objetivos es incentivar el ingreso de observaciones ciudadanas al portal del SEA, solicitando al organismo o a la misma empresa que modifique el lugar de emplazamiento del proyecto, que levante nuevos estudios de afectación y resguardo respecto a la flora y fauna local y que dé respuesta a las observaciones efectuadas por el Ministerio del Medio Ambiente.
Cabe recordar que como última instancia participativa, la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica del Norte estará este jueves 3 de abril, desde las 11:40 horas, en la explanada de las salas R de la casa de estudios, entregando información y promoviendo el ingreso de observaciones ciudadanas.
Los organizadores destacaron la participación en las charlas de las organizaciones ambientalistas FIMA y TANTÍ, entidades que expusieron sobre las afectaciones a nivel humano y territorial de este proyecto, como también los impactos hacia el pueblo Chango ubicado en la zona costera, que principalmente vive de la pesca artesanal y la recolección de algas.
También agradecieron a la Fundación Cielos para Chile, entidad que expuso sobre los efectos de esta iniciativa respecto a los compromisos internacionales que sostiene Chile el día de hoy sobre la observación del cielo y los observatorios. También advirtieron la falta de información por parte de la empresa en referencia a la contaminación lumínica y el polvo en suspensión.
Todos los participantes relevaron el rol de Chile a través de las observaciones astronómicas como un potente impulsor de la investigación, siendo fundamental el resguardo de la oscuridad de los cielos privilegiados con los que cuenta la Región de Antofagasta.