Pese a algunas críticas, Serviu reafirma construcción de ciclovías en Antofagasta y destaca sus beneficios

Tras los cuestionamientos del alcalde de Antofagasta, Sacha Razmilic y un grupo de vecinos, el director de Serviu, Víctor Gálvez, insistió en los beneficios que las ciclorutas traen para la comunidad y destacó que el proyecto de calle Eduardo Orchard de Antofagasta es parte de una estrategia mayor.

«Se busca conectar los distintos tramos existentes en la ciudad. Hoy se critica su construcción, alegando baja demanda, pero es un error esperar alta circulación en una red aún inconexa. Por eso  se construye la infraestructura base que permitirá que más personas opten por la bicicleta de forma segura, como ocurre en ciudades líderes en movilidad sustentable», indicó.

El proyecto fue diseñado en 2021 y, según destacó el director de Serviu, Víctor Gálvez, incluyó diversas instancias de participación ciudadana durante su elaboración. «Durante el proceso, se realizaron talleres y videoconferencias abiertas (disponibles en YouTube), donde se recogieron opiniones de la comunidad. Inicialmente, se propuso ubicar la ciclovía en la pista derecha, pero fueron los propios conductores de microbuses quienes solicitaron ubicarla en la izquierda para no interferir con la subida y bajada de pasajeros», explicó.

Además, Gálvez enfatizó que la iniciativa cuenta con aprobación técnica de todos los organismos pertinentes, incluyendo el Municipio y el Concejo Comunal, entidades que se han comprometido con su futura mantención.

Red de ciclorutas en Antofagasta

Las obras de construcción de estas ciclorutas comenzaron en septiembre de 2024 y finalizarán en julio de 2026, presentando actualmente un 5% de avance. Se construirán 8,3 km. nuevos, que se suman a los 13 km. del MOP en la costanera y los 15 km. del MINVU, consolidando una red de movilidad activa que alcanzará los 36 km. 

El director de Serviu graficó la incidencia de ciclorutas en comparación de las vías habilitadas para el tránsito de vehículos. «A modo de contraste, hoy existen más de 1.200 km. para autos y solo 28 km. para bicicletas, lo que representa apenas un 2%. Debemos poner datos claros en la mesa y en relación a las de calle Valdivia, inicialmente cuestionadas, hoy son parte del entorno y tienen uso, así lo indican los estudios del Ministerio y SECTRA (8K, 5K y 10K) que muestran un aumento sostenido de usuarios. La experiencia demuestra que la demanda aumenta cuando se da infraestructura segura y continua», explicó.

Finalmente, desde el Servicio de Vivienda y Urbanismo insistieron en que estas obras buscan la reutilización de espacios públicos, los que hoy se ocupan como estacionamiento ilegal de vehículos, puntualizando que «esta infraestructura incluye contadores automáticos para monitorear su uso, y su evaluación debe basarse en su impacto futuro, no en el uso actual».

«Es una inversión moderada que apunta a una ciudad moderna, equitativa y saludable, donde las personas tengan más y mejores opciones de moverse», finalizó Gálvez.