Con la llegada del verano, el cuidado de la piel y el cambio de vestimenta se convierten en temas habituales en los hogares. Sin embargo, esta temporada también trae consigo una mayor exposición a la araña de rincón, un peligro latente en el 40% de las viviendas chilenas, según un informe del Ministerio de Salud. Cada año, cerca de 500 personas sufren mordeduras de este arácnido, siendo el verano el período en que más aumenta su actividad y avistamientos.
En este sentido, el médico familiar del Hospital Clínico de la Universidad de Antofagasta, Dr. Camilo Torres Contreras, comparte importantes recomendaciones para identificar, actuar y prevenir las mordeduras de la araña de rincón, una especie cuya picadura puede tener consecuencias graves para la salud.
«La araña de rincón, generalmente habita en ropa, toallas o rincones oscuros. Su mordedura ocurre cuando se siente amenazada, como al intentar aplastarla o al vestirse sin percatarse de su presencia en las prendas», explica el Dr. Torres.
La mordedura produce un dolor agudo inmediato, acompañado de dos pequeñas marcas en la piel. Posteriormente, en minutos, aparece un enrojecimiento alrededor de la picadura, el cual, dentro de las primeras 24 horas, puede evolucionar a una placa violácea, conocida como placa livedoide.
El Dr. Torres, quien además es académico y jefe de carrera de Medicina, perteneciente al Departamento de Ciencias Médicas de la Facultad de Medicina y Odontología de la Universidad de Antofagasta, nos señala qué hacer ante la mordedura de la araña de rincón.
«Lo primero que debemos hacer es aplicar hielo. Esto ayuda a ralentizar la diseminación del veneno y reduce la inflamación. Lo segundo, es acudir inmediatamente a un centro de salud para descartar complicaciones graves», detalla el académico.
El Dr. Camilo Torres señala que las picaduras pueden desencadenar dos tipos de cuadros clínicos. Uno de ellos es loxoscelismo cutáneo, que afecta únicamente la piel, generando necrosis en el tejido circundante, debido a componentes citotóxicos del veneno.
«Por otro lado, puede ocurrir un loxoscelismo sistémico, que es más grave y puede presentarse entre las primeras 4 a 12 horas. Este cuadro provoca destrucción de glóbulos rojos, inflamación de vasos sanguíneos, llegando incluso a poder comprometer órganos como riñones e hígado», dijo el médico del HCUA.
«El tratamiento varía según la gravedad: desde antihistamínicos y corticoides para casos cutáneos, hasta hospitalización y manejo intensivo para cuadros sistémicos», agregó el Dr. Torres.
Prevención: clave para evitar riesgos
El jefe de carrera de Medicina de la UA, enfatiza que las mordeduras de araña de rincón son más frecuentes en verano y en ambientes urbanos, especialmente en espacios oscuros y mal ventilados.
«Algunas recomendaciones son mantener un aseo riguroso en el hogar; evitar la acumulación de ropa, cajas o muebles cerca de paredes; sacudir ropa y toallas antes de usarlas, especialmente si han estado guardadas o cerca de rincones; ventilar y limpiar regularmente closets y áreas oscuras», destacó el profesional.
Sobre la identificación, el experto describe que la araña de rincón es de color marrón con un abdomen ovalado. También resalta la presencia de la araña tigre, un depredador natural de la araña de rincón. «Si ven una araña tigre, déjenla tranquila, ya que no representa peligro para los humanos y contribuye a controlar a la araña de rincón», agrega el Dr. Camilo Torres.