La comunidad astronómica internacional ha manifestado una profunda preocupación ante el megaproyecto industrial de Hidrógeno denominado Inna, propuesto por AES Andes. La iniciativa, actualmente bajo evaluación ambiental, planea la construcción de un extenso complejo de más de 3.000 hectáreas. Su cercanía, a tan solo 5 a 11 kilómetros del Observatorio Paranal, operado por el Observatorio Europeo Austral (ESO) en la comuna de Taltal, genera inquietud en la comunidad científica.
ESO ha emitido una advertencia sobre el potencial peligro que este megaproyecto representa para uno de los cielos nocturnos más prístinos del planeta. La institución señala que la contaminación lumínica, la emisión de polvo y el aumento de la turbulencia atmosférica, inherentes a la operación de un complejo de tal magnitud, podrían causar daños irreparables a las observaciones astronómicas que se realizan desde dicha zona.
Tras esta advertencia, desde ALMA y sus socios AUI/NRAO y NAOJ, manifestaron su apoyo a ESO en contra de la creciente amenaza de contaminación lumínica cerca del observatorio Paranal y el ELT en la Región de Antofagasta.
Mediante un comunicado, resaltaron «la urgencia de garantizar la sostenibilidad a largo plazo de las observaciones astronómicas en Chile. ALMA solidariza con estos esfuerzos, reafirmando la importancia de la colaboración para proteger este invaluable recurso natural».
«Como parte de sus esfuerzos por proteger el cielo nocturno, el observatorio ALMA promueve todas las iniciativas, tanto a nivel nacional como local, para adoptar medidas que reduzcan la contaminación lumínica. Es fundamental garantizar que las generaciones futuras puedan seguir observando el cielo nocturno para mejorar la comprensión del cosmos por parte de la humanidad», recalcaron.