EXHIBICIÓN SE REALIZARÁ EN EL AUDITORIO DEL MUSEO RUINAS DE HUANCHACA ESTE VIERNES 4 DE OCTUBRE A LAS 20:00 HORAS.
Raúl Zurita no es solo un gran poeta chileno. Rockero (ha tocado junto a Electrodomésticos y González y Los Asistentes) y activista por los derechos de las y los ciudadanos, se ha transformado en una gran figura pública. Un creador sensible que además lleva 17 años luchando contra la enfermedad de Parkinson.
La cineasta Alejandra Carmona Cannobbio lo retrata y homenajea en Zurita verás no ver, documental que, tras un paso por festivales como Visions Du Reel, Valdivia, Fidocs, Femcine, Cinèlatino y Bafici, llegará a Antofagasta este viernes 4 de octubre para ser estrenado en el Auditorio del Museo Ruinas de Huanchaca (Avenida Angamos 1606) como parte del circuito Miradoc y gracias a la alianza con CCDoc. El valor de las entradas es de $2000 general y $1.500 para estudiantes y adultos mayores.
El documental muestra cómo el escritor se aferró al arte para sanar las heridas que sufrió durante el golpe de Estado en Chile. Realizó acciones poéticas desesperadas que impregnó en su propio cuerpo, en la tierra y el cielo. Hoy, en el norte de Chile, imagina la obra de su crepúsculo para la que aún busca financiamiento: «Verás un mar de piedras» son 22 frases proyectadas con luz sobre los acantilados de Pisagua, lugar donde se encontró la mayor fosa común de detenidos desaparecidos de la dictadura.
La propuesta de Retornable, Agencia Cultural, es una alternativa autogestionada de exhibición y formación de audiencias para la región de Antofagasta, que busca posicionar en la ciudad, una sala con programación de cine arte o cine independiente permanente y apoyar la circulación de obras audiovisuales nacionales e internacionales, siendo actualmente el único espacio de este tipo en la capital regional.
Para Alejandra Carmona Cannobbio, «Zurita, verás no ver», es una película sobre «un poeta que resistió a la muerte y al horror que vivió en dictadura a través de la poesía. El documental se centra en las acciones poéticas que inscribió en el cuerpo de la tierra y del cielo en la geografía chilena. Visita algunos capítulos de su vida que nos ayudan a entender cómo la poesía y el arte pueden ser una tabla de salvación ante las injusticias del mundo».
La realizadora agrega: «Zurita le ha dado voz al dolor del pueblo chileno, a las miles de víctimas de la dictadura que ya no pueden hablar. A través de su canto poético, nos ayuda a no olvidar jamás el oscuro capítulo de nuestra historia. Se enfrenta y no le teme al dolor. Nos devuelve con ello la dignidad, allí donde la habíamos perdido. Es una película que aborda también su enfermedad de Parkinson y cómo logra superar las dificultades con una enorme fuerza de creación incesante, pues no se rinde nunca ante la adversidad. A pesar de todo, la película al final es un canto a la vida y a la esperanza».