Mientras se realizaba la Parada Militar, el pasado 19 de septiembre, el grupo «hacktivista» Guacamaya filtró alrededor de 350 gigabytes de información, correspondiente a más de 400.000 correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas chilenas.
Este hackeo masivo expuso miles de documentos de áreas sensibles de la defensa nacional rotulados como “reservado”, “secreto” y “ultra secreto”, que incluyen informes de la estrategia de ciberseguridad, el sistema de monitoreo de comunicaciones satelitales en las fronteras y programas para almacenar bases de datos de inteligencia.
Con el pasar de los días también se han revelado informes que confirman que las Fuerzas Armadas y las policías (Carabineros y PDI) realizan todo tipo de «seguimientos» y «monitoreos» a actividades y publicaciones realizadas por organizaciones sociales y políticas, lo que muchas veces escapa a sus funciones.
Regionalista.cl accedió a una serie de informes de «inteligencia» de la Policía de Investigaciones (PDI) que fueron intercambiados a través de casillas de correo de distintos funcionarios militares del Estado Mayor Conjunto, en donde es posible constatar que dicha institución policial realizó «monitoreos» permanentes a movilizaciones, marchas y actividades realizadas durante el estallido social en la región de Antofagasta.
Informes
Los informes de «inteligencia» de la PDI dan cuenta del «monitoreo» y/o «seguimiento» permanente, durante los momentos más álgidos del estallido social, a las marchas y diferentes manifestaciones realizadas en Antofagasta y otras comunas de la región, incluyendo también los llamados «tecitos rebeldes», tocatas y actividades culturales, como el Tinkunazo Rebelde.
También se informa de la performance «El Violador Eres Tú» en Antofagasta, Calama, Tocopilla y San Pedro de Atacama, así como de la realización de cabildos, actividades de Derechos Humanos organizadas en el Sitio de Memoria Providencia, entre otras acciones.
Entre las organizaciones sociales o gremios que fueron objeto de «seguimiento» o un «monitoreo» constante de sus actividades por parte de la PDI, figuran los funcionarios de salud de Antofagasta, el Colegio de Profesores de Antofagasta, la CUT de Antofagasta, la Federación Nacional de Pobladores (FENAPO) sede Calama, la Coordinadora
de Organizaciones por Diversidad Sexual de Antofagasta, el Sindicato de Trabajadores de la Clínica el Loa y el Sindicato Minero Distrito Norte Calama.
También figuran la CONFUSAM Calama, el Colegio de Profesores El Loa, el Movimiento de Pobladores en Lucha de Calama (MPL), los apoderados y funcionarios de la “Escuela Especial Raíces» de Antofagasta, diversas comunidades indígenas del interior de la región, agrupaciones feministas, la Mesa de Unidad Social, la Asamblea Autoconvocada del Pueblo de Antofagasta, diversas organizaciones sindicales de la región, el sindicato de conductores
del TransAntofagasta y el Centro de estudiantes de periodismo de la Universidad Católica del Norte (UCN).
La Policía de Investigaciones también realizó un «monitoreo» o revisión de convocatorias realizadas a través de redes sociales y medios de prensa independientes o críticos del gobierno de Piñera, incluyendo a nuestro medio Regionalista.cl, tal como detalla un informe del 3 de diciembre de 2019:
«Antofagasta – Manifestación. A través del medio de prensa el Regionalista se está convocando a una actividad denominada “Tecito rebelde” en avenida Salvador Allende, bajo la consigna “Ven a disfrutar el ritmo de batuque femenino y varias
sorpresas”».
En los documentos también se mencionan nombres y apellidos de participantes y líderes de diversas organizaciones sociales, como también de personas que resultaban detenidas en algunas movilizaciones.
Al revisar en detalle estos reportes se puede constatar que hay imprecisiones y errores en algunas informaciones y descripciones de actividades.
Paranoia y sesgo político en los informes
También es posible advertir la paranoia de los funcionarios de la PDI que elaboran estos informes o que recogen esta información, como se puede apreciar en un documento de fecha 1 de noviembre de 2019 donde se da cuenta de la presencia de personas extranjeras observando una movilización, las que correspondían a un grupo de turistas rusos.
«Extranjeros en manifestación. Mientras 100 personas se encontraban manifestándose con barricadas en la intersección de las calles Manuel Antonio Matta con Maipú, tres individuos quienes utilizaban máscaras de guasón, observaban su entorno y tomaron registros fotográficos de la situación. Se hace presente que la apariencia física de estas personas, denotaba que eran extranjeros, mismos que habían sido divisados participando en la
totalidad de las actividades realizadas en el centro de Antofagasta en horas de la mañana y de la tarde de hoy. Posterior a un control se puede señalar que los individuos eran de
nacionalidad rusa y se encontraban de turistas en la zona andina (Perú-Bolivia-norte de Chile) (…)», relata el documento.
En otro informe de fecha 30 de noviembre de 2019, queda en evidencia el sesgo político con que se describen algunas movilizaciones en los informes de la PDI, como por ejemplo cuando se refieren a una expresión realizada por un grupo de personas a favor de Carabineros de Antofagasta, la que describen como una acción «con el objeto de dar cabida junto a organizaciones ya en funcionamiento al espacio para aquellos que si bien comparten las demandas, optan por una vía de diálogo sin causar daño al país y a las personas que lo componen».
Críticas a la PDI
Este no es el primer cuestionamiento al actuar de la Policía de Investigaciones de Antofagasta en el contexto del estallido social. Cabe recordar que diversas organizaciones sociales y de Derechos Humanos han denunciado «coerción» e incluso «torturas» por parte de funcionarios de esta institución policial durante el interrogatorio de personas detenidas en movilizaciones sociales.
Consultados por Regionalista.cl sobre la filtración de los documentos que dan cuenta del «monitoreo» y/o «seguimiento» de organizaciones sociales y de actividades realizadas durante el estallido social en la región, desde la PDI de Antofagasta declinaron referirse al tema.
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