Saco 1.2

Chile llega a la segunda vuelta del 14 de diciembre con un escenario competitivo y territorios divididos. Jeannette Jara obtuvo el 26,85% y José Antonio Kast el 23,92%, mientras que Franco Parisi irrumpe como tercera fuerza con un 19,66%. El mapa muestra a Jara ganando en Coquimbo, Valparaíso, la RM, Aysén y Magallanes; a Kast imponiéndose en gran parte del sur; y a Parisi dominando el norte, donde concentra su mayor fortaleza electoral.

Tras conocer los resultados, Jara llamó a proyectar una campaña basada en certidumbres:
“Creo que Chile es un país grande y no lo podemos olvidar (…) La democracia hay que cuidarla y valorarla. Nos costó mucho recuperarla para que hoy se ponga en riesgo”.

El presidente regional del PS, Hernán Vargas, destacó que la segunda vuelta abre una nueva disputa completamente distinta a la primera: “Esta es una nueva elección o más claramente una segunda contienda electoral, por lo que se concursa nuevamente a todo el electorado del país”.

Vargas enfatizó la necesidad de conectar con un electorado emergente: “Lo importante es que identifiquemos cuáles son las demandas de la ciudadanía. Claramente aparece un nuevo electorado, una clase emergente, que tiene otras necesidades”.

Desde el Partido Comunista (PC), la secretaria regional Luz Moore valoró la primera mayoría nacional obtenida por Jara, pero adelantó un escenario competitivo: “Estamos contentos con la primera mayoría obtenida, pero también hay que tener sentido de realidad. Aparecieron nuevas fuerzas políticas y eso obviamente mueve el tablero”. Sin embargo, rechazó el pesimismo que circula tras los resultados: “No es una tarea imposible, como algunos quieren hacer ver para instalar derrotismo.”

Desde el Frente Amplio, el Presidente Regional del FA, Camilo Kong señaló que se abocarán a enfrentar con fuerza e inteligencia la segunda vuelta “para escuchar, incorporar propuestas y convencer a la ciudadanía que esta vez no apoyó, que el camino es Jeannette Jara. Junto a un equipo y un programa de gobierno sólido y viable, que cuida y fortalece los avances sociales y económicos, para dar seguridad y progreso a nuestra patria”.

En tanto, Moore insistió en que la ciudadanía vota por propuestas concretas, más que por las siglas partidarias: “La gente no vota por partidos, vota por soluciones que mejoren de verdad su calidad de vida (…) Así que, tranquilos: nada está definido aún”.

Con un país dividido regionalmente y con el factor Parisi como clave para el balotaje, las colectividades ya se reorganizan para captar a un electorado más volátil, marcado por el voto obligatorio.