Las alarmas ya se encendieron: El proceso constitucional, impulsado por las elites políticas tras el rechazo a la propuesta emanada de la Convención Constitucional, va derecho a un nuevo fracaso.
Así lo han advertido diversas organizaciones sociales y políticas, quienes apuntan a la responsabilidad del Partido Republicano, tienda política que lidera el actual proceso, al contar con una contundente mayoría en el órgano.
En su columna del día Domingo, el reconocido periodista Daniel Matamala señalaba que la derecha está «usando la nueva Constitución como un caballo de troya para pasar subrepticiamente», una serie de normas «que atentan contra las libertades individuales».
La periodista Mayron Sills, en un artículo en El Mostrador, también advertía que Chile escribe una Constitución con predominio ultraderechista «y un discurso marcadamente ‘negacionista’ y ‘antimujeres’ que enciende la alarma sobre todo en un grupo social que participó de manera activa en el proceso anterior».
Y es que con la aprobación de una norma que establece «la protección de la vida de quién está por nacer» queda en entredicho la ley de aborto en tres causales, normativa que podría ser derogada, poniendo en riesgo un avance mínimo en los derechos de las mujeres.
A esto se suma la aprobación de una norma de «exención del pago de contribuciones de la vivienda principal», lo que beneficiaría a los más ricos del país, al tiempo que pone en riesgo el financiamiento de los municipios de Chile.
Datos del Servicio de Impuestos Internos y la Tesorería General de la República, indican que solo el 12,3% de las viviendas paga contribuciones, recaudando $1,1 billones para el Fisco en el primer semestre del año 2023.
Un tercio de esta cifra fue aportada por las municipalidades de mayores ingresos: Las Condes, Lo Barnechea, Santiago, Vitacura y Providencia.
Tal es la aplanadora de los republicanos, con el apoyo de amplios sectores de Chile Vamos, que incluso representantes de derecha como la alcaldesa Evelyn Mathei, han formulado duras críticas.
«En este Consejo lo que se ha ido instalando es que esta es la Convención del rodeo y del no aborto», indicó la jefa comunal de Providencia, agregando que «más parece un programa de gobierno de una mayoría circunstancial que una Constitución».
«Si las cosas siguen así, naturalmente no voy a poner mi capital político para la aprobación de esta nueva Constitución que se discute, que en realidad no es una Constitución», concluyó.
La última palabra la tendrán los chilenos y chilenas en el plebiscito a celebrarse el domingo 17 de diciembre de 2023, donde deberán optar entre las opciones «A favor» o «En contra» de la nueva Constitución.