Por Diana Moreno Pastenes
Profesora y directora
Las habilidades cognitivas son procesos mentales que nos transportan al campo de las aptitudes, nos introducen en el estudio del pensamiento, ya sea a través de procesos básicos como complejos, para posteriormente utilizarlos en las distintas etapas de la vida etaria y cotidiana, ya sea en lo personal, escolar, socio emocional y afectivo.
En la actualidad, la era tecnológica hace que nuestros niños y niñas reciban cuantiosa información proveniente de distintas y diversas partes, y frente a esto es imperativo que cuenten con las herramientas necesarias para poder procesar, discernir y evaluar dicha información para la toma de decisiones.
El pensamiento crítico se refiere a la capacidad de identificar, analizar, evaluar, clasificar e interpretar lo que está a nuestro alrededor. Es una habilidad del siglo XXI, que aporta todo tipo de beneficios a nuestros estudiantes en sus distintos períodos e impacta en su vida académica y profesional. Además de influir directamente en el desarrollo de las habilidades blandas como la creatividad, la resolución de conflictos, la empatía, la autonomía, la autocrítica y la adaptación.
Desde esta perspectiva, las escuelas, comunidades o centros educativos, deben comenzar en edades tempranas a despertar estas habilidades de orden superior en los niños, niñas, preadolescentes y adolescentes, para que los procesos pedagógicos, de metacognición y actitudinales sean eficientes y enérgicos, y puedan impactar de forma positiva al individuo como tal, y por ende a su entorno.
Es aquí donde se necesita instalar, potenciar y fortalecer urgentemente en nuestros niños, niñas, preadolescentes y adolescentes el pensamiento crítico, ya que les permitirá poder desenvolverse de forma eficaz, eficiente y efectiva en la vida, ya que obtendrán la habilidad del conocimiento, la toma de decisiones y la resolución de problemas, lo que les permitirá insertarse correctamente tanto de forma individual como colectiva, y poder aportar, ser un agente de cambio, para poder crear una sociedad más justa, más equitativa y más humana.