Tuvieron que pasar 6 años para saber nuevamente de Vampire Weekend, lo último que escuchamos de ellos fue el genial Modern Vampire Of The City (2013), el que sin duda es el mejor disco de la banda hasta el momento, la misma que partió con su álbum homónimo el año 2008, revitalizando al indie pop, mezclando sonidos tribales, música clásica y guitarras eléctricas.
Ahora vuelven con Father Of The Bride (2019), un trabajo bastante esperado tras el largo receso de la banda, quienes durante ese periodo pasaron de ser un cuarteto a un trío con la salida del multi-instrumentista Rostam Batmanglij, uno de los pilares creativos de la agrupación. Por lo mismo Ezra Koenig tomó las riendas de la producción junto al productor Ariel Rechtshaid, quien ya trabajó anteriormente con la banda y cuenta en su currículum con trabajos con artistas de la talla de Adele, Madonna y Brandon Flowers.
Este nuevo disco está conformado con 18 canciones, con un sonido muy diferente a su antecesor, esta vez mucho más otoñal, con toques de Soul, R&B, Country y Folk, muy parecido al Graceland de Paul Simon.
El disco parte con Hold You Now en una de las tres colaboraciones que están en este álbum junto a Danielle Haim (Vocalista de HAIM), abriendo con una melodía acústica para musicalizar a este dúo al que se le agrega un coro gospel. Con un comienzo bastante interesante, siguiendo con el sencillo Harmony Hall, Bambina, This Life y Big Blue, en donde ya tenemos una mezcla de guitarra acústica, percusión, bajo y sintetizador, sin perder el sonido acústico de este trabajo.
Llegamos luego a My Mistake, una balada marcada por la guitarra acústica, con arreglos de instrumentos de viento y la inconfundible voz de Koening. Después de este momento pasamos a la canción más experimental de este trabajo llamada Sympathy, en una mezcla de House con Flamenco, logrando una canción bastante bailable con elementos de contrabajo que nos invitan a mover los pies.
Luego, en el final del álbum, no hay mucho que decir, destacando piezas como las dos colaboraciones siguientes con el músico Steve Lacy en las canciones Sunflower y Flower Moon, la primera lanzada como adelanto. Siguen canciones como 2021, We Belong Together y Stranger, para ir decayendo finalmente en Spring Snow y cerrar con Jerusalem, New York, Berlín, siendo esta una canción guiada por el piano, un contrabajo y la voz de Koenig, quizás esta última parte del disco sea la más parecida a lo que ya conocemos de la banda.
En conclusión, Father Of The Bride es el resultado de la maduración de Vampire Weekend, sin perder las ganas de seguir explorando sonidos, como si el estudio fuera un patio de recreo y tuvieran la libertad para hacer lo que deseen, a lo que la banda ya nos tiene acostumbrados durante su discografía. En síntesis, se trata de un álbum correcto y con una excelente producción, pasando de un largo invierno de seis años para finalmente llegar a un maduro otoño.