Por Percy Peña Vicuña
Académico y director de la Escuela de Periodismo UCN
Ningún analista, ni siquiera el más perspicaz, pudo dimensionar el devenir de los acontecimientos que hoy estamos viviendo en todo el país. Esta mega crisis social es una representación del abandono, del olvido de una clase política que ha actuado con desdén por demasiado tiempo.
Recuerdo que en más de una conversación fuera de Chile cuando intentaba explicar la desigualdad imperante, mencioné que en cualquier momento se podría dar un estallido social, pero aún en los escenarios más extremos existía cierta desconfianza de que los chilenos y chilenas se pudieran levantar en contra de tanta injusticia.
Esta sensación de que «en Chile nunca pasa nada» parece que está llegando a su fin.
¿Qué pasará ahora? Es una interrogante difícil de contestar en un clima de incertidumbre, pero tal vez sea esta la oportunidad histórica de hacer un nuevo trato, un nuevo pacto social.
¿Qué necesitamos? Humildad. Sobre todo de la clase dirigente de todos los sectores políticos, quienes deben reconocer que ha existido un abandono por años y que los índices de desarrollo macroeconómicos no son suficientes.
La tarea es inmensa, pero al final del día debemos unirnos como país para hacernos cargo de lo pendiente y urgente.
Todos y todas tendremos un propósito al que aportar desde nuestros diferentes ámbitos de acción como ciudadanía, academia, profesional o trabajador.
Es tal vez está la oportunidad de hacer un mejor Chile.