Hay noticias que da mucho gusto contar. Es el caso de un humilde agricultor de la precordillera del Valle de Copiapó, quien a sus 87 años aprendió a leer y escribir, gracias al apoyo de Reeducate y Minera Kinross a través de un programa de alfabetización.
Se trata de Don Florencio Quispe, quien desde pequeño soñó con este momento, pues no había podido aprender, debido a que vivió toda su vida en la precordillera y su padre no lo llevó a la escuela
El paso del tiempo no fue un impedimento para cumplir uno de sus anhelos más grandes y es por eso que decidió comenzar a estudiar.
Aunque reconoce que ha sido muy feliz en su vida, esta era una meta que quería cumplir.
«Es un sueño, es verdad, ahora voy a seguir estudiando», confesó y agregó que «ahora le mando una carta a mi esposa o a mi hija».
Quispe es descendiente de la etnia kolla y junto a otros 14 comuneros se vio beneficiado con las clases gratuitas de este programa educativo.
La historia de este vecino copiapino demuestra que siempre se pueden cumplir los sueños cuando uno se lo propone y que nunca es tarde para alcanzar los anhelos y metas.
El sueño cumplido de Don Florencio Quispe fue recogido en un reportaje del canal 24 Horas.