A continuación publicamos la carta de apoyo de un grupo de investigadores extranjeros, solidarizando con la Dra. Adriana Aranguiz, tras su injusto despido por parte de la Universidad Católica del Norte (UCN) por apoyar el movimiento feminista:
Carta de apoyo
Por este medio comunicamos nuestro apoyo, solidaridad y admiración a la labor que la Dra. Adriana Aranguiz Acuña, investigadora de renombre internacional con grandes aportaciones a la ciencia, ha hecho al solidarizarse con las personas luchando por la equidad.
La Dra. Adriana (investigadora y docente recientemente desvinculada de la Universidad Católica del Norte) ha escuchado la voz y seguido el llamado de justicia que hacen las que históricamente han sufrido humillaciones en el ámbito laboral, social y académico. La Dra. Adriana ha tomado la decisión de estar del lado de las jóvenes que ven hacia el futuro y se imaginan un mundo más justo, y en sus manos asumen la lucha necesaria para estos cambios.
Al escribir esta esta carta nos angustia pensar en las consecuencia que traerá su despido de la universidad. Somos conscientes, que en el ámbito académico, la Dra. Adriana continúa y continuará con sus contribuciones intelectuales, esperando que su ímpetu por la justicia no sea castigada con censura intelectual. Pero la razón primaria que nos lleva a escribir esta carta es cuando pensamos en el precio de la censura y la injusticia. ¿Cuánto le cuesta al pueblo cuando una
de los suyos es callada?
Esperamos que las acciones de la Dra. Adriana sean tomadas en contexto. En toda Latinoamérica, y en el resto del mundo, se está dando un movimiento que busca la equidad de género. Como es de esperarse la reacción a este movimiento ha sido visceral. Condenamos el acoso laboral que ha sufrido nuestra compañera Adriana, y la decisión de la Universidad Católica del Norte de despedirla. Con tantas crisis de distintas índoles apareciendo a nivel local, nacional, e internacional las personas como la Dra. Adriana se vuelven más indispensables.
La acción de censura hoy es igual de atroz que en décadas pasadas, con la diferencia que hoy más que nunca, la necesidad de transformar al mundo es más evidente. Un mundo que solo sirve a la gente que está en el poder, y no permite cuestionarlos está poniendo en peligro nuestra existencia humana. En este contexto la Dra. Adriana da su voz y solidaridad a las mujeres que han sido agredidas. Todas las personas tienen la capacidad de mostrar compasión y respeto hacia las personas que afrontan agresiones con dignidad, sin embargo no todos lo hacemos.
La Dra. Adriana nos muestra con su ejemplo lo que significa solidarizarse con las que de una agresión han aprendido buscar cómo transformar el mundo, y el quedarnos callados nos hace cómplices de estén delito. La Dra Adriana es la voz de muchas mujeres que sufren día a día este acoso, alumnas, profesoras, empleadas, etc. Con este despido lo único que da a entender la Universidad Católica del Norte, es que solapa y protege a los delincuentes que abusan de su poder para ejercer los acosos y violaciones a la comunidad estudiantil.
Por este medio comunicamos nuestro apoyo y admiración a la labor que la Dra Adriana ha hecho al solidarizarse y no quedarse callada como muchos, con la personas luchando por la equidad.
La Dra. Adriana ha escuchado la voz y seguido el llamado de justicia que hacen las que históricamente han sufrido humillaciones en el ámbito laboral, social y académico. La Dra. Adriana ha tomado la decisión de estar del lado de las jóvenes que ven hacia el futuro y se imaginan un mundo más justo, y en sus manos asumen la lucha necesaria para estos cambios.
Atentamente,
Dra. Noelia S. Ferrando, Dra. en Ciencias Naturales, docente de la Universidad Nacional de La Plata, Buenos Aires, Argentina.
Dra. Rocío Fernández, Investigadora y docente del Grupo de Limnología Tropical de la FES Iztacala UNAM, México.
Dr. Diego de Jesús Chaparro-Herrera, Investigador y docente de la FES Iztacala UNAM, México, Laboratorio de Microecología Ambiental-UIICSE.
Paula Corina Hernández