Hace unos días la ciudadanía celebraba poder recuperar algo de sus ahorros previsionales, situación que se puede mirar desde muchos puntos de vista: Una derrota a la derecha y al gobierno, además de darle una estocada a las administradoras de fondos de pensiones y al mercado de capitales. Pero sobre todo es el triunfo y resultado de la movilización de la gente, no solo en las marchas de la Coordinadora No más AFP y todas las estrategias realizadas como organización. Se trata del estallido, de la cantidad de jóvenes vulnerados en sus derechos humanos, de los 3.000 presos, en que aún permanecen 2.500 detenidos en las cárceles del país. Es la creciente organización de los territorios para cubrir la necesidad más básica: el Hambre.
Por ello la importancia de este logro del 10%, pues no solo es un proyecto transitorio de acudir a parte de nuestros sueldos, es la real posibilidad de poder cambiar el actual sistema previsional en Chile, por un sistema de reparto, solidario y tripartito.
Ahora, con el retiro del 10%, seguimos viendo una desnudez de la realidad que viven miles de familias monoparentales, en que las mujeres sobreviven económicamente solas, sin apoyo de los padres, que no responden a la alimentación y mantención de sus hijos. Hemos visto miles de mujeres acudir a los tribunales de familia para realizar la retención judicial de los progenitores que van a cobrar el 10%, pues también ellas están cruzadas por la falta de ayuda gubernamental.
Uno de los derechos de los niños y adolescentes es vivir en condiciones de bienestar y un sano desarrollo integral y la responsabilidad compartida se refiere al compromiso u obligación que tienen ambos padres de brindar ese bienestar. El desarrollo integral es que ambos son necesarios para brindar a los niños y niñas los cuidados y amor que necesitan para su desarrollo. ¿Por qué movemos la cabeza para el lado y normalizamos el incumplimiento de deberes básicos de los padres?
Se han hechos muchos comentarios y memes con respecto a los papitos corazones en las redes sociales, pero es hora de detenernos y empezar la deconstrucción social en este tema, pues si Chile despertó también tiene que hacerlo en esta área, pues lo que construiremos cambiando la Constitución con el Apruebo, no solo es un nuevo rayado de cancha, es que tenemos que tener una nueva mirada con el futuro de este país. Y siempre pensando en los niños y niñas, porque son ellos los que vivirán en la democracia que empezaremos a desarrollar como pueblo unido.
Mirar para el lado y hacer como que no vemos la realidad, no va a eliminar el problema por el solo hecho de la indiferencia. Es necesaria la educación transversal para empezar a mirar nuestras prioridades, pues los niños son el futuro de Chile como dijo Salvador Allende y para ellos todos y todas debemos trabajar para dejarles el mejor legado de un país democrático.deberes