Entrevista | José Pedraza y la dramatización virtual: La “nueva forma” de hacer teatro

La pandemia del Covid-19 y las nulas políticas públicas del actual gobierno en beneficio de la cultura nacional y local, han dejado a los y las artistas atravesando un complejo escenario. La falta de trabajo y de apoyo ha obligado a las diversas disciplinas artísticas a buscar con urgencia reinventarse, y con ello, salvar sus creaciones y nuestra cultura.

Fue en este contexto que el actor, director y dramaturgo antofagastino, José Pedraza, decidió junto a su compañía “El Habitante Teatro”, trasladar su obra “Huellas” de las tablas a la dramatización virtual, como una forma de salvar su proyecto y su fuente laboral, pues tanto José como su elenco viven del teatro.

¿Cómo surge esta necesidad de continuar con tu trabajo teatral en plena pandemia?

Somos una compañía multidisciplinaria compuesta por artistas de diversas partes del país y el hacer teatro es nuestra fuente laboral estable, no tenemos otra. Por esta razón decidimos continuar con la obra “Huellas” en formato zoom. Se trata de la dramatización de mi texto de manera virtual. Para ello, tuve que rearticular todo mi trabajo artístico. Por ejemplo, incluimos material audiovisual, tuvimos que aprender a actuar mirando a una cámara y algunos de los actores se transformaron en técnicos digitales. Pese a lo complejo de esta transformación, hemos realizado tres funciones y nos ha ido súper bien, incluso nos vieron en otros países como Estados Unidos, España, Argentina y Colombia. La verdad es que este formato nos permitió democratizar la obra.

¿Cuéntanos cómo nace “Huellas” y de qué trata?

Primero que todo quería hacer algo local, porque soy nacido y criado en Antofagasta y me encantan sus colores y los tonos cálidos del desierto, el frío de la noche y lo árido. Fue así que investigando llegué a una noticia que trataba sobre la muerte de una mujer de origen dominicano que, seducida por el “sueño chileno”, decide ser una caminante del desierto, pasando por lugares ilegales y padeciendo las inclemencias del desierto. Finalmente, esta mujer queda botada en el camino y fallece. Según la noticia, esta mujer, madre y esposa, vestía de manera muy ligera y se arriesgó para juntar dinero para su familia, teniendo un fatal desenlace que deja en evidencia, una vez más, la extrema vulnerabilidad y desamparo de cientos de extranjeros que llegan al país. Esta historia me conmovió muchísimo y me causó impotencia, por eso decidí escribir sobre lo sucedido.

¿Quiénes conforman el elenco?

En “Huellas” participa la actriz antofagastina Paulina Moraga, el actor y bailarín, Luis Moreno, la actriz Daniela Lara y el actor Diego Carvajal. Ellos son de Santiago. En tanto, la producción está a cargo de Daniela Eichin y en la parte técnica digital Christian Arend y Bastián Panadés, que si bien en esta oportunidad están en esa área, también son actores. Todos ellos tienen una larga experiencia en teatro y un tremendo compromiso por su labor artística. Además, les sobra talento.

¿Pretenden continuar con el formato de dramatización virtual o tienen otros objetivos?

Afortunadamente la obra la alcanzamos a presentar en enero pasado en el FITZA, fue una muy bonita experiencia, y por lo mismo esperamos presentarla en nuevos festivales durante el próximo verano, ojalá se pueda. Sobre la dramatización virtual de la obra, es probable que tenga nuevas presentaciones, pero por ahora estoy en otro proyecto digital que consiste en clases de preparación para exámenes de actuación y también estamos ayudando a compañías más pequeñas a insertarse en el mundo de la dramatización virtual.

En el plano personal, ¿cómo partió tu pasión por el teatro?

Si bien estudié en el Liceo Comercial, siempre busqué expresarme artísticamente. Partí pintando en la Casa de la Cultura y luego descubrí la academia de teatro del liceo. Ahí partió todo. Al poco tiempo comencé a participar de los concursos del teatro Pedro de la Barra y me gané el premio al mejor actor. Después la actriz Teresa Ramos, que estaba a cargo de la compañía Arlequín y dirigía en ese momento la obra “El escándalo de la calle Huanchaca”, me invita a participar. Y yo obviamente acepté con sólo 18 años. Ese fue el empujón que tuve para tomar la decisión de irme a Santiago a estudiar teatro en la escuela de Gustavo Meza, lugar donde me brindaron una serie de oportunidades teatrales y la posibilidad de compartir tablas con actores y actrices destacadas a nivel nacional como Elsa Poblete. Además, tuve el beneficio de estudiar becado, ya que estudiar teatro es carísimo y mi familia no podía ayudarme económicamente, pero sí emocional e incondicionalmente.

Desde tú experiencia y la de tus pares, ¿cómo ves la cultura local hoy?

Es muy triste, porque actualmente la cultura esté invisibilizada. Ni hablar del ministerio que tampoco existe. La cultura atraviesa su peor momento. No hay oportunidades y los y las artistas estamos pasando momentos muy complejos. Espero que esto se pueda revertir para que el arte nacional tenga el lugar y el respeto que se merece, como parte esencial de nuestra identidad, de nuestra historia y de la transformación que el país está desarrollando.