Ximena Carrera, dramaturga de la obra teatral “Greta”, nos cuenta los detalles de la representación que busca generar un diálogo entre la ciencia y el teatro, de las actrices y, además, lo que se viene el próximo año en Puerto de Ideas con la obra “Random” y otros secretos más en la elaboración de la obra.
Una vez finalizada la función, el público pudo conversar con la directora Constanza Brieba, el productor ejecutivo Javier Ibacache y con la dramaturga: Ximena Carrera (1971), también actriz, fundadora de la compañía de teatro La Trompeta en 1997 y autora de obras como Naturaleza Muerta (2003), Medusa (ganadora del “Premio del Círculo de Críticos de Arte de Chile Mejor Obra de Teatro Nacional”, en 2010) y Lucía (2015).
Su nueva obra, Greta, es producida por la Corporación Cultural de Quilicura, Puerto de Ideas y la Fundación de Teatro del Lago, en Frutillar. Aborda temáticas como el cuidado de las ballenas y el matriarcado, entregando variada información al respecto.
Llamó la atención de los asistentes que el elenco, compuesto por las reconocidas actrices Coca Guazzini, Kathy Salosny, Carmina Riego y Daniela Lhorente, actuaran con el guion en la mano. Ésto, debido a que el espectáculo no es un montaje, sino un “semimontaje y lectura dramatizada”.
En la ronda de preguntas, inmediatamente surgió la duda:
¿Cómo fue tu aproximación con las ballenas y cómo llegas a Greta?
En un principio, tengo que confesar, dije “ballenas” (baja los hombros)… todo bien con la ballenas, ojalá que no las maten, pero no tenía mayor vinculación con éstas. Entonces me puse a investigar y en el minuto en que te empiezas a sumergir en el mundo de ellas, te das cuenta que hay distintos tipos y que en Chile hay una presencia importante: el 50% aproximado de las ballenas a nivel mundial pasan por Chile por un tema de alimentación.
Encontré que es una cultura matriarcal, es decir, es la hembra quien va con la cría año a año. La investigación me fue seduciendo con las míticas ballenas, empezó a ser un mundo muy fascinante el que se me presentó.
En exclusiva para Regionalista.cl, la también profesora cuenta detalles de la representación escénica y de su investigación que se extendió por más de cuatro meses.
Presentaron la obra como un semimontaje ¿es cosa de tiempo para que sea un montaje?
Sí, claro. Tiene que seguir el proceso de ensayos. Lo que están haciendo ahora es soltar el texto las actrices, es decir, ya deben hacer el trabajo de aprenderlo completamente.
¿Las actrices tienen poco tiempo para aprender el guion?
Sí, ese es un tema, la logística de los ensayos, porque la realidad en Chile es que las actrices y los actores no tenemos un sueldo profesional que nos permita dedicarnos solo a ensayar una obra, tengo que hacer, muchas veces, otras cosas para poder ensayar recién a las 7 de la tarde.
¿Cuánto tiempo demoró el proceso de investigación?
Creo que cuatro meses. Partí en junio investigando, leyendo literatura, creo que leí entre cuatro y cinco libros…
¿Alguno que te haya impactado?
La Ballenera de Quintay, Moby Dick también lo leí y, aunque en muchos momentos no me gustó, es un pedazo de libro. También los relatos de Francisco Coloane como El Camino de la Ballena, algunos documentales como La Caleta, que está en internet.
También me impactó, sobretodo, las entrevistas con los biólogos. Uno es John Canto, del Museo de Historia Natural, y el otro es Juan Capela, que pasa mucho tiempo en terreno observando las ballenas (el científico registró 30 años de mortales ataques de orcas a ballenas). Ahí también están rescatadas las visiones que representan las hermanas, una mucho más teórica y la otra va más a terreno.
¿Tuvieron la oportunidad de ver ballenas?
No (se lamenta), me parece que en el verano vi, pero por casualidad, en Tongoy muy a lo lejos. No he tenido la oportunidad de ver más cerca, pero quiero.
¿Es una de las intenciones de la obra visibilizar la homosexualidad femenina?
Desde el momento en que la obra aborda el mundo de lo femenino, la homosexualidad es un tema importante porque, en general, por la historia patriarcal que hemos vivido la humanidad desde, básicamente los egipcios en adelante, el lesbianismo ha sido muy silenciado.
No es la trama central, porque no va de eso la obra, sino que gira en torno a las ballenas y lo matriarcal, pero sí me pareció muy interesante la propuesta de Javier (Ibacache) que una personaje tenga esta condición homosexual no asumida y de alguna manera logra liberarse para vivir su sexualidad como le plazca.
El título de la obra ¿es una referencia a Greta Thunberg, impulsora del movimiento mundial sobre medioambiente Fridays For Future?
Siendo muy honesta me encanta la sincronía que ocurre, pero supe de esta chica hace un mes, cuando la obra ya tenía nombre.
El nombre de la obra surge de Grete Mosby, que fue la antropóloga que estuvo a cargo del Museo Nacional de Historia Natural entre el sesenta y algo hasta como el ochenta. Fue una mujer muy relevante, justamente en que se supiera cuál tipo de ballena es la del esqueleto que está en el museo, porque durante casi un siglo no se pudo saber cuál ballena era.
Es una especie de homenaje hacia ella el nombre de la obra.
La ballena también se llama Greta…
Hay un juego por la investigación que hicimos. A veces los biólogos estudian tanto las ballenas -que si bien tienen un código, como J124, qué se yo- se vinculan tanto con las ballenas como con las personas, entonces, hay veces que le ponen el nombre de la primera polola, de una prima o un amigo. Hay un bautizo, y por eso me pareció interesante que el padre le haya puesto Greta a su ballena favorita, también como una forma de homenajear a su propia mujer.
¿De qué forma están vinculadas las obras Greta, la del año pasado en Puerto de Ideas (Réplica) y la de 2020?
La del año pasado, Réplica, hay un personaje, un adolescente, que se sabe que se va a suicidar al desierto. En esta obra (Greta) el padre no estaba, no se sabe si se mató o si las abandonó, es una gran interrogante.
En este tercer montaje que viene el próximo año, cuyo título es Random y lo está escribiendo el dramaturgo chileno Gerardo Ettinger, se encuentran estos dos personajes desaparecidos de Réplica y Greta. Esto permite jugar con los tiempos y tratar distintos temas.
Fue una casualidad de la que después nos dimos cuenta.
La obra Greta contó con centenares de asistentes antofagastinos en su debut en Puerto de Ideas. La pieza escénica se presentará nuevamente el 11 de mayo en el Teatro del Lago en Frutillar, y luego tendrá una temporada en la nueva sala Mori de Santiago, desde julio del presente año.
Redacción 
Paula Corina Hernández