Daniela Lafferte, presidenta FEUCN y la ola feminista: «De corazón espero que toda la sociedad cambie»

Por Redacción Jun 10, 2018

Daniela Lafferte es la actual presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica del Norte (FEUCN) de Antofagasta y por estos días ha estado en una vorágine de reuniones, movilizaciones, actividades y planificaciones, propias de su cargo, pero que se han visto acrecentadas con el movimiento feminista.

En medio de su agenda, la dirigenta estudiantil se hizo un espacio para conversar con Regionalista.cl y compartir sus impresiones sobre el momento histórico que se vive y sobre las proyecciones futuras.

Esto es lo que conversamos.

¿Qué te parece el gran movimiento feminista que se desarrolla en este momento en todo Chile y también en las universidades de Antofagasta?

Es una gran lección de lucha por la dignidad, los derechos nunca se han ganando pidiendo por favor. En este minuto se está luchando por justicia. Orgullosa me siento de que esta ola llegase hasta nuestra ciudad y fueran las mismas mujeres las que se movilizaran y organizaran.

¿Qué lo que se espera de este movimiento, cuáles son los cambios qué crees que se deben producir en nuestra sociedad que actualmente es tan machista?

De corazón espero que toda la sociedad cambie. Pero siendo realista se que eso no pasará a mediano plazo, aún así se que este movimiento ya está haciendo su efecto. Actualmente muchos compañeros están replanteando su machismo al igual que algunas mujeres. Al día de hoy escucho a muchos, muchas y muches más reivindicándose como feministas y yo creo que eso es lo que esperamos, sembrar la semilla.

¿Has sentido discriminación o un trato injusto por el sólo hecho de ser mujer?

Sí. Y lo más fuerte es que cada día soy más consciente de ello. Porque a medida que uno se va deconstruyendo, va desnaturalizado patrones. Es por esto que para mi muchas cosas ya no pasan desapercibidas. Como el que en instancias familiares soólo las mujeres trabajen en la cocina, el dar discursos de manera masculina o percibir que amigas están en relaciones tóxicas que propicien a la violencia.

¿Qué te pareció el discurso presidencial? ¿Cómo lo evalúas?

De manera negativa la verdad. No puedo dejar de ver una figura carismática en el presidente que de alguna manera distrae a la ciudadanía del fondo. En este minuto tenemos movilizaciones feministas a lo largo de Chile y no se hace cargo del piso mínimo que es la educación no sexista.

Daniela durante la última marcha realizada el 6 de junio en Antofagasta.

¿Cómo crees que los medios de comunicación en general han abordado el movimiento y las demandas feministas?

En lo personal siento que en virtud del apoyo de la ciudadania, los medios nos están dando tribuna como mujeres, más no todos han comunicado de manera responsable ni tampoco han respetado espacios de organización que son privados y separatistas. Es necesario recordar que los medios de comunicación son esenciales para los cambios sociales, supongo ningún medio quiere que la historia los condene.

¿Cómo evalúas tu experiencia como presidenta de la FEUCN?

Este proceso ha sido mágico, cuando nosotres nos candidateamos a la FEUCN nuestro principal objetivo era propiciar el empoderamiento estudiantil, palabra que todes conocíamos, pero creo que no todes entendamos o por lo menos yo. Ahora ya a mitad del periodo, la entiendo, la vivo y la veo en cada compañera que está en este movimiento, porque aquí hasta la más tímida se manifiesta. La federación aquí cumplió su rol haciendo un paso al costado para no entorpecer la organización, dar herramientas para apoyar. Más no dirigir, porque las chicas no necesitaban un héroe, si no que se transformaron en sus propias heroínas. Esto que relato en ninguna sala de clase lo podría haber aprendido y lo agradezco de todo corazón.

¿Qué reflexión final un harías sobre el momento que se vive en la lucha feminista?

Sumándome a lo anterior, creo que esto es histórico, es una lucha transversal de todas las mujeres. Muchos critican este movimiento y yo sé que aspiramos a mucho. Tal vez no consigamos cambiar todo el mundo, pero la semilla ya está sembrada. El día de hoy ya no es tabú declararse feminista, ahora las compañeras cada día están más conscientes de la sumisión en la que nos encontramos y cada vez veo más gente haciéndose cargo de su deconstrucción. Espero que las próximas generaciones sigan luchando. Y sean nuestras hermanas, primas, hijas y nietas que se levanten para parar el mundo y hacerlo pensar y querer bien.

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