Tras la bochornosa presentación del gabinete regional por parte del Intendente Marco Díaz, que incluyó cambio de nombres a última hora y la remoción de dos seremis en un lapso de 24 horas, la polémica no parece tener fin.
En declaraciones a El Mercurio de Antofagasta, el jefe regional hizo un especie de mea culpa, asegurando que «creo que ahí no fuimos finos en un criterio final, pero esto incluso antes de que se materialice el nombramiento fue detectado y resuelto inmediatamente».
Díaz atribuyó lo sucedido a un «aspecto de sensibilidad».
«Se revisó a las personas, pero claramente quizás la lección es que estos temas no sólo se ven con el prisma jurídico, más allá del estado en que se encuentra alguna causa. También debimos poner más énfasis en la sensibilidad que podría generar algún nombramiento, porque en definitiva nada nos puede quitar el foco de los desafíos de la región. Y si había algo que nos va a distraer, quizás debimos ser más previsores», precisó la autoridad regional.
Por su parte, el partido Evópoli, que resultó muy dañado con la remoción de los dos seremis pertenecientes a sus filas, aseguró a través de su directiva que defenderá los cupos que dejaron Ignacio León en Hacienda y Leonardo Ledezma en justicia.
«En los próximos días daremos a conocer los nombres de las personas que postulamos para esos cargos. Como partido esperamos mantenerlos y continuaremos defendiendo los cupos entregados», confirmó Jonathan Vergara, presidente regional de la colectividad en declaraciones a los medios de comunicación.
Así las cosas, las aguas parecen no querer aquietarse en la intendencia en lo que ha sido un accidentado inicio de gestión del nuevo gobierno de Piñera en la región.